"Por que en los latidos de mi alma encontré consuelo"
Aquel que rodó hasta mis pies y con sus manos arrugadas trato de abrazarme buscando curar las heridas dejadas por otras almas perdidas.
Tal vez el desvelarme junto a tus labios produjo esa sensación de amargura y arrogancia al tratar buscar alguna contestación a mis mil y una interrogantes dejando mi versión de la realidad trastornada.
¿Que no tiene sentido amar la nada?
Si al parecer sus notas musicales son las causantes de mi tortura y se encargan de desgarrar lo poco que queda dentro de mi.
No suspiro para saber que estoy viva, lo hago para poder sobrevivir dia a dia... paso a paso
Sin tener que aparentar cordura, suspiro.
Ya mis ojos no perciben tu presencia, ellos ni siquiera se acuerdan de ti.
Sin embargo recuerdo tu aroma, no se me está permitido olvidar...
Las lágrimas fueron contadas al caer del cielo y creo que enmudecí esa última noche que susurre tu nombre, seguido de un adios.
Que triste es amar tu ausencia y odiar tu aliento
Jan 7, 2004
©Natalia M. Villarán Quiñones
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